Hoy arrancamos en la escuela del Cabo con historias de ballenas. Es lo que propuso la maestra y los niños aceptaron, cuentos de ballenas y otros habitantes del mar: tiburones, pecesitos de colores… ¡cangrejos! Sirenas, unicornios marinos… Sapitos Darwin.
Hoy miércoles arrancamos a saber más de las ballenas… que son grandes, que tiran agua para arriba, que andan lento, que juegan mucho entre ellas y con los seres humanos, que se dejan empujar con el viento levantando la cola…
Resulta que…
«Había una vez unos delfines… jugando, con una pelota, jugando al fútbol como todos los días. Era un clásico… entre delfines y orcas… El arquero de las orcas es el salmón y el de los delfines el caballito de mar que atajan… con la cola, claro. Las orcas iban ganando 4 a 3 y el réferi seguía todas las jugadas. El réferi es el pulpo, pero como abajo del agua no hay aire en vez de pito tiene una anguila colgada al cuello… Las faltas las cobra con un shock eléctrico de la Anguila que todos pueden ver, inmediatamente…
Así en un momento se ve una gran sombra que viene del lado de las orcas… Los delfines les avisan «¡Miren atrás!» «No nos van a engañar, no nos vamos a distraer» dicen las orcas… les vamos a ganar. Pero el pulpo ve que se viene algo grande y suspende el partido… El aviso lo hace con la Anguila eléctrica, el pulpo no puede contenerse… produce una descarga de tinta… se le escapa la tinta y ya no se ve nada… La ballena se asusta y pega un salto para esquivar la mancha…
Pobrecita, ella venía a mirar el partido y se queda triste…
El pulpo le pide disculpas… y le pregunta para qué quería ver el partido. Es que queremos jugar al fútbol… ¿Y contra quién podrían jugar ustedes con lo grandotas que son? Contra la celeste. Entonces consiguen camisetas de Uruguay y de Argentina y se preparan para jugar el Clásico del Río de la Plata. El pulpo está preocupado… si llegan a enojarse las ballenas… Uh. Se va a jugar el partido. ¡La tribuna está que arde!!!!